PICÓN DE FELIPE


 

Uno de los miradores más espectaculares del Parque Natural de Arribes del Duero. Desde este balcón natural se pueden admirar las vistas de la Presa de Aldeadávila y el fuerte desfiladero que presenta el río Duero en su recorrido por este paraje al abrigo de los imponentes farallones de granito.

Para acceder a este mirador hay que recorrer a pie, desde el merendero Llano de la Bodega, un sendero de 900 metros.

Este rincón guarda la Leyenda de Felipe. Esta entrañable historia nos cuenta que un pastor de Aldeadávila llamado Felipe, acudía diariamente a pastar por estos terrenos con su rebaño de cabras. Desde el lugar que lleva su nombre se quedó prendado de la belleza de una muchacha del pueblo portugués de Bruçó. El cauce del río Duero no le permitía cruzar al país vecino y reunirse con su amada. Desesperado con esta situación se le ocurrió que al derribar este muro de granito podría construir un paso que le permitiese encontrarse con añorada portuguesa, para ello se valió de pequeñas herramientas e incluso con sus propias manos.

Dicha historia es una antigua tradición del siglo XVIII o primer decenio del XIX.